Brunello Cucinelli toma el control de Sartoria Eugubina

Madrid – La cada vez más popular firma de lujo italiana Brunello Cucinelli, ha adquirido la compañía igualmente italiana Sartoria Eugubina. Empresa especializada en el diseño, la producción y la venta de prendas de sastrería, cuya adquisición le servirá a la multinacional italiana para seguir reforzando su capacidad de producción, a medida que sigue impulsando su crecimiento de cara ya a esta nueva etapa a la que se abre tras haber logrado superar la barrera de los 1 000 millones de euros de facturación.

En un información que se encargaron de adelantar desde la misma Brunello Cucinelli a la agencia de noticias italiana Ansa este pasado 28 de marzo de 2024, la multinacional italiana anunciaba y confirmaba que había pasado a adquirir la firma de moda y fabricante de trajes y prendas de sastrería Sartoria Eugubina. Empresa con sede en la localidad italiana de Gubbio, al norte de la misma región central de Italia de la provincia de Perugia en la que Brunello Cucinelli mantiene su sede, en concreto en la localidad de Solomeo, cuya adquisición se ha cerrado en base a unos términos que no se han desvelado, pero desde los cuales sí se ha pasado a confirmar que Sartoria Eugubina pasa ya a incorporarse y a operar bajo el paraguas de Brunello Cucinelli. Multinacional en cuyas estructuras ha pasado ya a integrarse Sartoria Eugubina, incluido en lo que respecta tanto al modelo de negocio propio desde el que venían comercializando sus creaciones bajo su marca de modas homónima en el mercado, como en lo que respecta a las creaciones que realizaban para terceras marcas, entre ellas la misma Brunello Cucinelli.

Se trataban estas de una suma de operaciones que venían realizando desde Sartoria Eugubina desde sus instalaciones en la histórica ciudad italiana de Gubbio, de manos de un equipo integrado por cerca de 70 sastres italianos especializados, que han pasado ya a incorporarse a las filas de Brunello Cucinelli, y que se significan como uno de los principales activos precisamente sobre los que se sustenta y ha llevado hasta esta operación. Adquisición con la que la multinacional italiana del lujo vuelve a salir a demostrar su apoyo y su protección por el extraordinario “saber hacer” vinculado a la industria de la moda y del textil italiana, tras la adquisición en marzo de 2022 de la compañía textil italiana Cariaggi Lanificio, para la que el pasado mayo de 2023 alcanzaban un acuerdo con Chanel para darles cabida en su capital social; y del anuncio, hace escasamente unos meses, de la construcción de un nuevo centro de producción de Brunello Cucinelli en la localidad de Penne, en la provincia de Pescara.

“La de la pequeña, pero importante Sartoria Eugubina, es una historia noble, compuesta de una auténtica artesanía que ha sabido ganarse un más que merecido respeto”, enfatizaba el mismo Brunello Cucinelli a través de una nota. Por ello mismo, “me gustaría recordar el magnífico trabajo de quienes la han sabido preservar hasta el día de hoy, en el que estamos muy felices” de poder anunciar “esta adquisición, que para nosotros supone un enriquecimiento en términos de recursos humanos realmente especial”, enfatiza Cucinelli.

Nueva fábrica en Gubbio

Además de anunciar la adquisición de Sartoria Eugubina, Cucinelli también ha anunciado que, tomando el testigo de ese anuncio sobre la construcción de una nueva planta de producción en Penne, que se espera que termine por entrar a estar en operativo hacia la primavera de 2025 dando cabida a una plantilla de entre 300 a 350 trabajadores “altamente cualificados”, Brunello Cucinelli también va a proceder a construir un nuevo centro de producción en Gubbio. Fábrica que servirá para tanto preservar como para amplificar el extraordinario “saber hacer” artesanal que han venido construyendo a lo largo de estos años desde Sartoria Eugubina, en lo que al tiempo les permitirá ampliar sus operativas, y a Brunello Cucinelli continuar ensanchando los límites de sus operaciones. Un objetivo que se mantiene como una cuestión esencial para con dentro de sus objetivos de seguir superando esa barrera de los 1 000 millones de euros de facturación que alcanzaban a romper al cierre de su último ejercicio fiscal de 2023; crecimiento que defienden el seguir sustentando sobre esas mismas cualidades excepcionales vinculadas al “Made in Italy” y que entienden como un valor diferencial, para tanto sus propuestas de moda como para la hora de desarrollar sus estrategias de inversión.

“El mundo entero mira a nuestra Italia con profunda estima, y ciertamente creemos que nuestras manufacturas relatan de manera sincera y muy especial cuál es nuestra manera de trabajar, y el extremo cuidado que ponemos para la hora de poner en valor las hábiles manos de nuestros estimados artesanos”, defiende Cucinelli. Desde ese entendimiento, “ahora también en Gubbio construiremos una pequeña fábrica, con una vista espléndida del paisaje sobre su ciudadela medieval, donde será posible trabajar en armonía con la creación”, anuncia el fundador, presidente ejecutivo y director creativo de la casa de modas italiana. “Tengo mucha confianza en el valor de las prendas hermosas y bien hechas en Italia que pueden dejarse como legado”, y desde esa perspectiva, “quizás en el futuro el tema” principal sea “no a quién vendemos estas prendas especiales, sino qué manos expertas crean estas pequeñas obras maestras”.