Pharrell Williams y Nigo reinventan el lujo clásico en el desfile de Louis Vuitton

París - La marca Louis Vuitton ofreció este lunes un desfile modoso y alejado de la moda streetwear para el inicio de la Semana de la Moda masculina en París, a pesar de que era una colaboración inédita entre su creador estrella Pharrell Williams y Nigo, de la marca Kenzo.

Abrigos amplios de tweed y de tonos otoñales, gruesas botas de nieve estilo moonwalk cortadas a la altura del tobillo, cazadoras de estilo universitario, una reinterpretación de la chaqueta de aviador bomber: el desfile, organizado en uno de los patios del museo del Louvre, se concentró en las referencias clásicas de la casa, con toques futuristas y guiños al Japón de Nigo.

"Recuerda el futuro", pedía la invitación al desfile

"La colección masculina Otoño/Invierno 2025 se asoma al futuro mediante el telescopio de la historia", añadían las notas del desfile.

Pharrell Williams, músico, creativo y recién nombrado embajador de buena voluntad de la Unesco, es amigo de Nigo (Tomoaki Nagao) desde hace décadas, y juntos tienen su propio proyecto de ropa callejera de lujo (y helados), el Billionaire Boys Club. El desfile de París tomó prestadas algunas referencias de ese proyecto "club de multimillonarios", como la ropa de camuflaje verde y marrón, que estampaba, entre otros, una elegante chaqueta de motorista.

Diseños juguetones, damero rosa

El desfile arrancó con música clásica contemporánea, para luego dar paso al dúo de hip hop The Weekend y Playboi, autores del éxito "Timeless".

En la audiencia destacaron los actores Bradley Cooper y Callum Turner, el baloncestista francés Victor Wembanyama, el artista plástico japonés Takashi Murakami y el cantante colombiano J Balvin. Los diseños juguetones e infantiles de tonos brillantes, al estilo de Murakami, aparecieron en detalles como un bolso de mano rectangular, que imitaba una tradicional maleta Louis Vuitton pero plegada como si fuera un fuelle. Otro bolso, aún más excéntrico, adoptaba la forma de una langosta.

Para el frío, el hombre adepto al damero de Louis Vuitton puede optar por mostrarlo en tonos rosa, con un pullover decorado con pedrería incrustada. En tanto, la cazadora bomber se desmarcó de su versión clásica al no ajustarse a la cintura, flotando suelta.

Algunas prendas aludieron a sitios de Tokio. Aunque la influencia callejera se percibía en los estampados estilo graffiti, Pharrell Williams y Nigo lograron un equilibrio entre el multiculturalismo y la elegancia sin mensajes políticos, incluso después de la resonante investidura en Washington del nuevo presidente estadounidense, Donald Trump.

Antes de Louis Vuitton, la marca japonesa Auralee presentó sus nuevas colecciones para hombre y mujer en un desfile mixto. Trajes amplios combinados con sudaderas con capucha y cremallera, largos vestidos de punto, chaquetas de cuero o de lana, y chaquetas cortas fueron las propuestas de su creador, Ryota Iwai, quien ofreció una vez más una línea de básicos bien pensados con detalles cuidados.

La Semana de la Moda masculina de París, la cita más importante del sector, arrancó con cierta febrilidad entre bambalinas debido a los recientes cambios en la dirección artística de casas como Chanel, Celine o Maison Margiela. Observadores señalan que el baile de nombres podría continuar.

Lanvin, por su parte, regresa a París tras dos años de ausencia con la primera colección de Peter Copping.