Birkenstock se inspira en la cultura zapoteca para esta colección
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La firma alemana de calzado, Birkenstock, lanzó una colección de nombre Zapotec II en colaboración con artesanos oaxaqueños del Taller Jacobo y María Ángeles. Esta es la segunda ocasión en la que la marca crea una colección intervenida por artesanos mexicanos.
Inspirados en las artesanías de madera de Copal tradicionales de Oaxaca, llamadas tonas y nahuales, la compañía desveló una colección de 336 piezas decoradas a mano. Los artesanos detrás de estas coloridas sandalias pertenecen a la comunidad del pueblo de San Martín Tilcajete, ubicado en los Valles Centrales de Oaxaca. La colección estará disponible en México a partir del mes de septiembre en las boutiques de Birkenstock y en su tienda en línea.
Zapotec II busca rendir homenaje a las tradiciones milenarias oaxaqueñas y exaltar la riqueza cultural del país. Para apegarse a la tradición detrás de esta manifestación artística, los artesanos tuvieron completa libertad de crear sus propios diseños, mismos que plasmaron sobre los modelos de Birkenstock Arizona y Gizeh, que son de los más vendidos en el país. Por esta razón, cada uno de los pares es único, con una representación distinta de lo que el artista quiso mostrar sobre las tonas y nahuales.
Las tonas y los nahuales son seres míticos de la cultura zapoteca que hablan de espíritus animales que protegen y guían a cada persona desde su nacimiento. Su representación gráfica suelen ser animales o animales fusionados con el humano, ya que se dice que cada persona tiene un espíritu animal protector. Estos animales míticos y protectores que comparten el alma y el destino de la persona que lo recibe.
Diseños que preservan árboles
La nueva colección de Birkenstock viene acompañada de una iniciativa de responsabilidad social, ya que los ingresos por la venta de estas sandalias serán donados al proyecto Palo que Habla, impulsado por el Taller Jacobo y María Ángeles.
Palo que Habla es un espacio dedicado a la conservación de los árboles de Copal para fomentar un mejor manejo de los recursos naturales utilizados por los artesanos, de manera que se preserve la tradición de tallar la madera de Copal sin dañar el medio ambiente. El espacio nació hace 14 años para rehabilitar los ecosistemas degradados por el uso de esta madera para artesanías en San Martín Tilcajete, Oaxaca.
Ahora continúan trabajando en una manera sustentable del uso de la madera del árbol de Copal y al mismo tiempo previenen la desaparición de las artesanías que la utilizan. Para ello, rescatan plantas nativas y realizan la reproducción de los árboles por semilla, con lo que conservan la vialidad genética de la especie y el desarrollo de la vida útil de los árboles. Cada año logran reproducir más de 4,500 árboles de Copal para reforestar distintos sitios de la comunidad y preservar la materia prima que los artesanos utilizan.
Photo Credit: Cortesía Birkenstock