Ianndey se rebela con una pasarela en las calles de Nueva York

Este no era el primer año que Ianndey presentaría su más reciente colección en el marco de la semana de la moda de Nueva York. Esta presentación se ha convertido en clave para el negocio de la dupla mexicana. Sin embargo, unos días antes de su pasarela este año recibieron la noticia de que el show sería cancelado.

Ianndey se ha presentado en el pasado como parte del grupo de ONxSET que reúne a marcas y diseñadores de diferentes países en un evento de moda durante Fashion Week. Este año no sería la excepción. El evento estaba programado para el 10 de septiembre en el Rockefeller Center. Sin embargo, unos días antes del gran momento, la plataforma comunicó que uno de sus inversionistas más importantes incumplió el contrato. Con el tiempo encima, la plataforma no logró conseguir otra fuente de financiamiento y se vio en la necesidad de cancelar.

Algunos diseñadores decidieron presentar sus colecciones en otras plataformas alternas y otros optaron por no presentarse. “Nosotros, por otro lado, decidimos hacer nuestro show en las calles de la ciudad", compartió Ianndey para FashionUnited. “La colección ya estaba lista y nosotros también. Así que tomamos la decisión de hacer nuestro propio show de una manera más creativa. La colección se presentó en distintos puntos de la ciudad, como en Times Square.”

Toman las calles

El plan era presentar en Nueva York cuando todos los ojos de la industria se encuentran en la ciudad, por lo que los diseñadores Guanajuatenses siguieron con el plan, pero de una manera menos ortodoxa. En lugar de montar una pasarela en un recinto especial, decidieron convertir las calles en pasarelas. Así, las modelos desfilaron en estos espacios abiertos casi como si se tratara de un “happening”. Entre los espacios que recorrieron, destaca el bullicioso Times Square.

La marca presentó 20 looks de su colección de nombre "Minera". De acuerdo con la marca, esta colección está inspirada en la correlación de la belleza y pureza de los minerales que son extraídos de las minas. Los diseñadores también buscan que las piezas hablen sobre la naturaleza en nuestros días, el impacto ambiental que se ha sufrido, las sequías y la desertización.

Las piezas se mantienen en una gama de tonos terrenales y metálicos, con algunas que rompen con lo esperado al brillar con tonos como rojo sangre o turquesa saturado. Los materiales más suaves, como gasas y satinados, se contrastan con cadenas y detalles metálicos. El juego de contrastes también se ve en las prendas vaporosas y con mucho vuelo junto a aquellos vestidos entallados que detallan la figura femenina. Pedrería, flecos, cristales, telas metalizadas, lentejuelas, aplicaciones tridimensionales, cuentas y encajes de flores son algunos de los detalles que separan esta colección de aquellas que la dupla creativa ha presentado.